Evolución de la Ropa Interior Masculina - 1ra Parte

Evolución de la Ropa Interior Masculina - 1ra Parte

HISTORIA DE LA ROPA INTERIOR MASCULINA

1ra Parte

"Desde su aparición, el ser humano ha sido capaz de adaptarse a distintos climas y situaciones diferentes de forma mucho más rápida y eficaz que la mayoría de los animales. Una de las formas que ha tenido de adaptarse a las distintas condiciones climáticas ha sido a través del vestido, que nació como una necesidad para protegerse del frío. Poco a poco, el hecho de vestirse fue convirtiéndose también en una forma de distinción social y personal que identificaba a una sociedad concreta y al individuo dentro de la misma.

 La evolución de la ropa a través de los años ha ido de la mano de la industria y de la moda, y esto también ha incluido el nicho de la ropa interior.

 A continuación te presentamos una crónica de la historia y evolución de la ropa interior masculina.

Era de Hielo

 El llamado hombre de hielo, Ötzi, que vivió hace unos 5.300 años y cuyo cuerpo momificado fue encontrado en los Alpes en 1991, vestía un tosco calzón/taparrabos  hecho de piel de cabra, que cubría sus partes íntimas, el cual es considerado el “antepasado” de los modernos calzoncillos.

Egipcios

 Resulta imposible saber con exactitud en qué momento comenzaron a usarse los primeros calzoncillos, pero las primeras pruebas contundentes sobre el uso de ropa interior se encontraron en el Antiguo Egipto. Cuando, en 1922, Howard Carter descubrió la tumba de Tutankamon, el faraón más famoso de Egipto.

 Y es que la momia de Tutankamón, datada en el siglo XIV a. C., es el resto arqueológico más antiguo del que disponemos si hablamos de ropa interior masculina. Entre el ajuar funerario del faraón se encontró un especie de pañal de lino, que se colocaba bajo la túnica. Además de una función higiénica y de protección, también tenían un significado social, ya que de acuerdo al historiador y antropólogo Tim Labert, en el Antiguo Egipto la figura masculina era mucho más importante que la femenina, por lo que los hombres (también las mujeres favoritas de la corte y algunas prostitutas de alto standing) eran los únicos que podían portar ropa interior.

 Griegos

 En la Antigua Grecia, los hombres (a diferencia de los egipcios) se deshicieron de los calzones. Según Tim Labert, era una época en la que se rendía culto a la belleza masculina, y en consecuencia, a la desnudez del cuerpo del hombre, por lo que la ropa interior quedó como un atributo exclusivo de los grandes héroes, como Aquiles y sus mirmidones, que, según el relato de Homero, llevaban una especie de suspensorio que les protegía los genitales al entrar en combate.

 Romanos

 La época dorada del Imperio Romano fue el momento en el que el uso de la ropa interior se generalizó entre los hombres, motivado por una mayor preocupación hacia la higiene personal.

 Los hombres debajo de su túnica llevaban una segunda prenda también larga llamada subucula y una especie de pañal de lino que cubría el ano y los genitales, y se ataba con un cinturón llamado subligaculum, que los gladiadores hicieron muy popular al lucirlo bajo sus túnicas en la arena del circo. Estos pañales eran una evolución de los antiguos perizoma etruscos, únicamente destinados a los hombres.

 Edad Media

 Durante la Edad Media, sobre todo después de la Guerra de los Cien Años y de la epidemia de peste negra (siglo XIV d.C.) comenzó a desarrollarse una cierta industria textil. Esta estaba orientada a la higiene en el caso de la población de a pie, y al lujo, con tejidos más ricos y adornados, en el caso de las clases altas.

 Según relata el historiador Tim Labert: “La Iglesia Católica consideraba el cuerpo humano como algo pecaminoso que debía ser ocultado; por eso, los hombres también usaban largas camisolas o túnicas para cubrir sus intimidades, aunque con el tiempo se fueron permitiendo el lujo de usar una prenda más cómoda y ceñida, llamada “culotte”, que era una especie de calzón largo. La ropa interior todavía favorecía a los varones frente a las féminas.

Renacimiento

 La ropa interior toma una mayor importancia y comienza a mostrarse a través de rendijas y aberturas que se practicaban en la ropa.

 Estos "cortes" en las prendas se denominaban stratagli o "acuchillado" y dejaban ver la camisa blanca que se vestía por debajo de las prendas de vivos colores, creando bonitos contrastes.

 El "acuchillado" fue introducido en la Italia del Cinquecento a través de los lanzichenecchi o "servidores de la tierra": una tropa de soldados de origen alemán, conocidos por su bravura, sus grandes adiestramientos técnicos e identificados por su característica forma de vestir. Del ejército, la tendencia del "acuchillado" pasó a las altas esferas italianas, que en ese momento marcaban la moda europea, y de allí al resto de países.

 Así mismo aparece un especie de suspensorio genital, que mantenía en posición erecta el miembro viril. Fue muy popular durante el siglo XVI. Tanto que G. K. Chesterton dijo que parecía que en aquella época hubiera una epidemia de priapismo.

 Revolución Francesa

 La mujer fue la principal protagonista del gran cambio en el mundo de la ropa interior. Mientras que los varones acabaron como esclavos de la lana.

 A partir de 1880 surgió en Europa el Movimiento para la Salud con el uso de la Lana bajo los auspicios del doctor Gustav Jaeger, ex profesor de Fisiología en la Universidad de Stuttgart y fundador de la Jaeger Company, fabricante de prendas de lana. El doctor Jaeger proclamaba los beneficios que representaba para la salud el uso de lana áspera y porosa en contacto con la piel, puesto que permitía “respirar” al cuerpo.

 En Inglaterra, este movimiento tuvo partidarios tan distinguidos como Oscar Wilde y George Bernard Shaw, y durante más de dos décadas dominó el sector de la confección de ropa interior masculina.

Siglo XX

 Fue en el siglo XX cuando la ropa interior, tanto femenina como masculina, comenzó por fin a volverse cómoda.

 Los años 20’s y 30’s

 La ropa interior de caballero en ese momento se hacía de nainsook, lo cual era una tela de muselina suave - a menudo se utiliza para hacer ropa de bebés. La muselina, se nos dice, debe su nombre a la ciudad iraquí de Mosul. La muselina fue descubierta por primera vez por europeos que, ahora llamamos peregrinos, navegaban hacia el “nuevo mundo”.

 Obviamente, la muselina es una fibra natural y no sintética. Pasaría algún tiempo para que la invención permitiera a los diseñadores crear líneas de ropa interior masculina mucho más vibrantes, como por ejemplo los coloridos bóxers, calzoncillos, tangas y trajes de baño que tenemos hoy.

 Sin embargo, en los años 20’s hicieron la introducción de telas pre-encogidas, las cuales revolucionarían la ropa interior de hombres en los años 30’s.  Además, en los años 20’s vemos la introducción del calzón boxeador o boxer brief que fue bautizado así por ser  una versión "abreviada" de su predecesor - el popular “Long John” o calzón largo. Este último extendiéndose hasta abajo de los tobillos, mientras que el boxer brief hasta la mitad del muslo.

 A pesar del hecho de que Estados Unidos estaba en las profundidades de la Gran Depresión, 1934 fue un año decisivo en la historia de la ropa interior masculina. Fue entonces cuando “Jockey” introdujo los calzoncillos con ventilación “Y” (bragueta abierta), por su parecido a una “Y” invertida.

 Los calzones largos hasta casi la rodilla, que habían sido la prenda interior habitual desde inicios del siglo XX, se acortaron a raíz de la crisis económica de 1929, cuando la escasez obligó a fabricar prendas más escuetas y, sobre todo, mucho más baratas, lo que desembocó en la creación del primer slip en 1934.

 La compañía “Jockey” comenzó a fabricarlos en la década de 1930. Se dice que los susodichos fueron inspirados por los populares trajes de baño usados ​​en la Riviera francesa. Fueron las primeras prendas interiores que se ajustaban al cuerpo y se consideran bastante subidas de tono en el momento.

 Cuatro años después de que “Jockey” introdujo la  “ventilación-Y” de diagonal. La innovadora característica se adaptó también tanto a sus bóxers cortos y como a los largos.

 Hoy en día aún se pueden comprar calzoncillos y bóxers con la bolsa de acceso en forma “Y”, o una adaptación al modelo original.

 Poco después del Día de Año Nuevo en 1935, una de las principales tiendas departamentales del medio-oeste de Estados Unidos, puso a la venta el nuevo calzón “Y” de “Jockey”. Los directivos de la empresa pensaron que los diseñadores de ventanas estaban locos al dedicar aparadores completos con diminutos calzones de hombre, especialmente cuando la ciudad estaba siendo golpeada con una de las peores tormentas de nieve en un largo tiempo. "Quiten los calzoncillos y pongan la calzones largos en esa ventana", decían los directivos. Pero los clientes sabían reconocer lo bueno y seiscientos paquetes de calzoncillos se vendieron antes de que los escaparatistas tuvieran tiempo de desmantelar el escaparate.

 En 1936 “Munsingwear” desarrolló su línea de ventilación bolsa de "canguro" horizontal en su ropa interior masculina..."

Visíta nuestro catálogo en línea y descubre la gran variedad de diseños que tenemos para ti: https://strongstoreunderwear.com.mx/collections/all

Referencias bibliográficas:
• Webedia Brand Services. (2015). Magnet: Los hitos de la Historia de la ropa interior (desde Tutankamon a Nadal en calzoncillos). Recuperado de https://magnet.xataka.com
• Fernández, López Vicente. (2015). Quo: Historia de la ropa interior. España. Recuperado de https://www.quo.es/


Dejar un comentario

Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados